25 Mapomas = 50 Maratones

Esta historia empezó hace unos años atrás, por entonce yo llevaba terminados 22 mapomas y 44 maratones en total, un día me fijé que si los cuadraba podía en el año 2014 correr en el mismo maratón las bodas de plata en Mapoma y las de oro en maratones.

Con esta idea transcurren los 3 años siguientes hasta llegar a finales de 2013 en Amsterdam con los 49 maratones terminados.
Ya estamos en Abril de 2014, unas semanas antes de la cita con Mapoma me preparo una camiseta con la que quiero correr este maratón, con una leyenda a la espalda que reza "1990  -  2014                       25 MAPOMAS 50 MARATONES"



Según se va acercando el día me empiezan a asaltar todo tipo de miedos, la idea es correr rodeado de amigos a terminar sobre 3h 30' me empiezo a preocupar, y si me dan calambres y si me da una pájara y si el tío del mazo se ceba conmigo, ¿habré hecho buena preparación?, vamos que llevar muchos maratones no te cura de los nervios.
El día de antes hace mucho viento y eso me preocupa, pero la mañana del maratón amanece sin apenas viento, con una temperatura muy agradable para correr.
Como casi todos los compañeros esa noche duermo poco, con las varias miradas al despertador sobre las 3 de la madrugada, con un miedo atroz a no oír el despertador, al final sobre las 6 de la mañana me levanto y empiezo el ritual de siempre, vaselina por las zonas de roce, Podosan en los pies para evitar las ampollas, el desayuno el mismo de todos los días exceptuando el zumo de naranja y ya al tren camino de Atocha, en el tren me encuentro con mi amigo y tocayo "El Juli", una vez en Atocha nos dirigimos al ropero a dejar la bolsa, aprovechando para entrar a evacuar tensión antes de dirigirme a la zona designado por los FFDR para hacernos una foto de familia.



Al llegar al punto lo primero que hacen es encasquetarme un globo naranja para marcar el ritmo de 3h 30' saludos, abrazos, sonrisas y fotos.
Seguidamente nos dirigimos a los cajones que cada grupo teníamos asignados, la espera del disparo de salida transcurre con muchos nervios que calmamos a base de bromas y ánimos mutuos.
En un momento concreto nos empezamos a mover, aunque no hemos oído ningún disparo, la realidad es que ya se ha dado la salida,



los primeros kms transcurren con un pequeño desnivel negativo y aunque tenemos que adelantar a bastantes corredores el tiempo empleado se ajusta a lo previsto, en estos primeros kms me entran ganas de orinar y pienso que cuanto antes pare mejor, así lo hago y lo más rápidamente que puedo me incorporo al grupo, los primeros 5 kms salen clavados, ahora aprovechando el terreno favorable ganamos algunos minutos al crono que nunca nos vendrán mal para más tarde, estos kms transcurren entre bromas, ánimos y muy buen humor, el apoyo del publico es maravilloso y te da alas, poco a poco los kms se van sumando, a estas alturas vuelvo a tener necesidad de evacuar, paro nuevamente y al incorporarme a la carrera lo hago al lado de parte del grupo que salio conmigo pero que se ha ido quedando algo rezagado, les saludo un momento y nuevamente salgo pitando a coger a los compañeros con los que iba y a los cuales les deje a cargo del globo, este esfuerzo lo noto en las piernas, estamos por la zona centro de Madrid,



el paso por la Gran Vía, Callao y Sol son muy emotivas, los laterales del recorrido llenos de gente animando y muchos amigos dejándose los pulmones gritándonos y haciéndonos fotos. En Sol me espera mi familia, mi hija "Lydia" y mi mujer "Chelo" para acompañarme en tramos que ya teníamos de antemano programados, mi hijo "Jesús" se queda en la logística, este encuentro siempre me hace mucha ilusión, con ellas nos vamos acercando al ecuador del recorrido, nuevamente y ya empieza a fastidiarme, tengo ganas de orinar, pero esta vez lo tengo claro cuando me incorpore a la carrera ahí me quedare no pienso volver a acelerar el ritmo o me puede destrozar, mi vuelta a la carrera coincide con el paso de los amigos que llevamos rezagados y me quedo con ellos, lo curioso es que varios de los miembros del primer grupo también han parado y formamos nuevamente un gran grupo, nos dirigimos hacia la Casa de Campo en donde me están esperando de nuevo mi mujer y mi hija, este año la Casa de Campo se hace muy corta y la gente sale muy enteros de la zona, a esas alturas ya solo vamos mi amigo Pablo y yo con el globo, se me une durante un rato otro amigo "Jesús" que me prometió que correría conmigo, al final no pudo ser, pero quería al menos acompañarme unos kms, a estas alturas de carrera me encuentro muy entero y le propongo a Pablo aumentar el ritmo y así lo hacemos justo coincidiendo con una de las mayores cuestas del recorrido la c/ Segovia que la subimos zigzagueando entre los corredores, ponemos un ritmo que ya no decaerá hasta meta, tanto es así, que en ese punto nuevamente se tenían que incorporar mi mujer e hija y al no podernos seguir optan por quedarse para acompañar a otros amigos que vinieran detrás, en uno de los avituallamientos Pablo se me va unos metros y ya no vuelvo a contactar con él, en este momento me quedo solo, por el camino voy adelantando a algunos amigos y también recibo muchos ánimos de los muchos forofos que nos esperan en los kms finales, a la altura de la plaza de Cibeles considero que llevar el globo ya no tiene ningún sentido puesto que ya voy solo y decido quitármelo y regalárselo a unas pequeñas espectadoras que nos están animando, estos últimos kms pasan tranquilo hasta que llego al km 41 donde se me incorporan 2 amigos "Angel y Victor"



estos empiezan a animarme y hacerse fotos conmigo, también arengan a los espectadores al grito de "Este tío lleva 50 maratones" la gente me aplaudía, me animaba y yo con una sonrisa de oreja a oreja, entro en el paseo de coches del Retiro, son los últimos metros soy feliz, ya nada me quita el éxito, disfruto de esos metros como nunca y al cruzar la meta me reciben varios amigos nos abrazamos, nos felicitamos y nos hacemos fotos, en la linea de llegada me entrevista un periodista del periódico "El País" al día siguiente mi aventura aparece en dicho periódico, me quedo en la linea de meta a esperar al resto de amigos, para saludarlos, felicitarlos y hacernos fotos con una cara de felicidad que no se puede explicar.



El tiempo final en meta fue de 3h 27' 7"

Agradecimiento especial a mi familia por su apoyo y su compresión.



10 comentarios:

melchor saiz-pardo dijo...

Eres muy grande Julián!!! Una vez más, enhorabuena por los 25 y los 50!!! Y a partir de ahora te quedas sin excusa para parar de apuntarte a nuevas maratones.
Abrazo fuerte.

Unknown dijo...

julian eres todo un ejemplo a seguir mr.MARATON a sus pies señor y que pueda disfrutar mucho tiempo tus logros, un abrazo.
juan

F. Galceran dijo...

Enhorabuena, Julián!
Llegar a 50 maratones está al alcance de sólo unos pocos privilegiados. Que envidia más sana me das....Yo sólo llevos seis Mapomas ....
Muhas felicidades!!!

Fedor.



Unknown dijo...

Enhorabuena Julian!!!
Eres muy grande!!!
Ahora a por los 100 maratones, que se que puedes con eso y más.

Un Abrazo y muchas felicidades!!!

JVGM dijo...

¡¡Pero qué le pasa a esa vejiga!!

¡¡Enhorabuena Julián!!

Lo difícil que es hacer lo que tu has logrado, y todavía mejor...

¡¡Todo lo que te queda!!

Un abrazo y a seguir quemando kilómetros.

Unknown dijo...

Lo dicho Julián un autentico privilegio conocerte y compartir km, y mas en esta carrera tan especial para ti, eres un tío grande apache y tienes una familia maravillosa!

Julian L. S. dijo...

Muchas gracias a todos por las felicitaciones amigos, para mi fue un día maravilloso, rodeado de amigos, acompañado por mi familia y animado por muchísimos amigos por todo el recorrido.
Gracias a todos nuevamente.

vigaro dijo...

Enhorabuena Julián, que grande eres!!

Lo que has conseguido está al alcance de solo unos pocos privilegiados.. y lo que te queda.

Próximo reto 50 MAPOMAS y 100 maratones.
De haberlo sabido hubiese comprado el país de recuerdo, cachins

Un fuerte abrazo

Javier G. Martín dijo...

Y cayó el 50!!! macho lo tuyo es increíble, mi mas sincera enhorabuena Julián.

Unknown dijo...

Apache eres muy grande tío, tan grande como tus cincuenta maratones y más grande que esos veinticinco mapomas. Y los que te quedan, es un placer y un honor compartir km contigo